[AF] Desde Santander: AF, AE,..., A. Paciente

[Manuel Machuca]

José Ramón: felicidades por la efemérides. Todavía recuerdo cuando disteis
el paso al frente para montar esta nueva lista, heredera de la de AF de la
Universidad de Granada, y mi prevención y escepticismo antes sus
posibilidades. Gracias por quitarme la razón. Y gracias por tu referencia en
este tema.
Respecto al tema, recuerdo mi propuesta de centro piloto, citado con cierta
sorna por el profesor Mariño como inicio de este correo. Está bien eso de
criticar, porque hay que ser crítico, y de la crítica se mejoran las
propuestas. Lo que ya me gustaría es escuchar alguna propuesta alternativa.
En esta profesión solo veo quienes se dan patadas en el culo por seguir
aferrados al machito, y quienes se reinventan a sí mismos, siguiendo la
máxima de Giuseppe Tomasi de Lampedusa, eso de cambiar todo para que nada
cambie. Quizás haga falta algún Consenso más o algún Foro más (lo siento,
Raquel, pero veo que te vas a enfadar otra vez conmigo).
Particularmente, no le tengo miedo a los profesionales de la enfermería. Lo
que leo que van a hacer es bueno para la sociedad y para los pacientes. Si
alguien ofrece a la sociedad algo que necesita y no tiene, debe ser
bienvenida. Y lo que ofrecen es consecuencia de su desarrollo profesional y
de los caminos que se le van abriendo en esta evolución.
Pero los enfermeros no van a hacer todo en referencia a los pacientes
crónicos. Los médicos también lo hacen y lo harán, cada uno desde sus
perspectivas y su propia mirada profesional, la que les hace ser profesiones
específicas. Y nosotros también podemos tener nuestra propia mirada,
complementaria a la de las otras profesiones. Está claro que si queremos
hacer educación para la salud, ahí confluimos todos, y pueden darse
sinergias...y duplicidades, que pueden ser poco eficientes. Pero en cada
práctica profesional específica hay una mirada propia y una común, como es
la tarea educadora.
Una práctica profesional se caracteriza por una mirada específica y propia,
que propone soluciones a un problema que tiene la sociedad. La mirada de los
médicos es la de abordar problemas de salud desde el conocimiento
diagnóstico y terapéutico; la de los enfermeros es abordarlos desde el
cuidado; nuestra mirada específica y propia debería ser la de encontrar
respuestas a los problemas de salud, intentándolos explicar desde la
complejidad de la farmacoterapia. Que yo sepa, nada se menciona en ese texto
que ha enviado el profesor Mariño.  Eso sí, si no tenemos claro cuál es
nuestra mirada específica, si no lo tenemos claro, pues vemos fantasmas por
todos lados. Aunque eso sí, probablemente la sociedad no permita veinte años
más de inacción. Bueno, no nos lo está permitiendo y ahí van nuestras
ganancias. ¿Se puede pedir rescate ante la Unión Europea para una profesión,
en lugar de para un país?
Llevamos veinte años en España defendiendo un establecimiento en lugar de
defender una práctica. Y a quienes defendemos una práctica, nos acusan de no
defender un establecimiento, cuando la mejor manera de defender un
establecimiento es hacerlo con una práctica profesional, útil, necesaria y
oportuna para la sociedad. 
Me cansa decir esto. Nos ahogamos en un corporativismo endogámico y
pueblerino, que no le interesa a nadie, que nos hace lamentarnos y quejarnos
todos los días, pero que no nos da agallas para afrontar el futuro. Y
alrededor de esta profesión, no hay agallas. Los profesores de universidad
no tienen agallas; los farmacéuticos no tenemos agallas; los dirigentes que
nos damos los que no tenemos agallas, no pueden tener agallas;  y el
liderazgo que puede salir de todo esto, tampoco tiene agallas. Como tampoco
tienen los políticos que nos han tocado estos años, y que se van a ir el año
próximo cubiertos de gloria, siendo la decepción y la falsedad  más grande
que haya habido. Siento vergüenza de haber tenido ilusión hace siete años, y
pensar que teníamos posibilidades de cambiar el futuro.

Quizás no queráis centro piloto. Está bien. Decid qué queréis y cómo pensáis
solucionarlo. Porque esto se acaba. En mi caso particular, estoy a punto de
ERE. El tiempo me ha dicho que no es posible tener una consulta decente en
una farmacia. Aguantaré mientras pueda, porque ya no sé hacer otra cosa.
Demasiado viejo para aprender algo nuevo, demasiado joven para jubilarme,
demasiado terco para volverme atrás.
Que os vaya bien con las amenazas externas. Me dan más miedo las nuestras.
Como me dijo Lida Strand hace 10 años: "No me dan miedo los que están en
contra de la Atención Farmacéutica; los que me dan miedo son los que dicen
que están a favor".